Por Vicente Valdés Vivanco
Durante la Cuenta Pública 2021, el presidente Sebastián Piñera destacó la capacidad que tiene nuestro país de convertirse en uno de los principales productores y exportadores de hidrógeno verde en el mundo.
“Tenemos un enorme potencial, que ya estamos desarrollando, para transformarnos en uno de los mayores y más eficientes productores de hidrógeno verde, un combustible limpio y renovable que podemos producir con agua y energías limpias”, dijo en su discurso.
Chile es un país rico en Energías Renovables No Convencionales (ERNC), como la energía eólica, solar, marina y geotérmica, según un estudio realizado por ChileRenovables.
En dicho documento se demostró que el desierto de Atacama es la región con mayor radiación solar del mundo (275 W/m2), mientras que el análisis de la División de Energías Renovables determinó que la región de Magallanes cuenta con uno de los mejores recursos eólicos del mundo.
La calidad de energías limpias con las que cuenta nuestro país ha sido destacada en varias oportunidades, de hecho, el reporte de la empresa de investigación estratégica BloombergNEF, Climatescope 2020 que evalúa la transición energética en las economías en crecimiento, posicionó a Chile como la mejor economía emergente del mundo para invertir en ERNC, posición que también ocupó en 2018.
“A través de políticas sólidas de energía limpia y su compromiso de eliminar gradualmente la generación de carbón, Chile sigue decidido a hacer la transición a una matriz más limpia. El país ya cumplió con su objetivo de 2025 del mandato de energía limpia de 20% de generación para servicios públicos y apunta a que el 60% de su generación de energía provenga de fuentes limpias para 2035”, se lee en el informe donde se destaca también que el país ocupó el segundo lugar en la encuesta del año pasado.
Hidrógeno verde en Chile
La materia prima del hidrógeno verde (H2V) hace referencia a estas energías sostenibles, ya que el combustible energético se obtiene al separar la molécula de agua (H2O) con electricidad proveniente del sol, aire, mar o tierra.
Según la información recopilada, el hidrógeno es una fuente poderosa de energía, tres veces más potente que el diesel, y se puede usar como combustible en transporte de carga, maquinaria pesada e incluso, para crear fertilizantes y explosivos, con amoniaco verde.
Pero, ¿puede Chile convertirse en uno de los mayores y más eficientes productores de hidrógeno verde en el mundo?
Según el reporte Chilean Hydrogen Pathway de la empresa de consultoría McKinsey & Company, la calidad de los recursos y las zonas estratégicas de producción, como el norte y el extremo sur del país, nos permitirían producir el hidrógeno verde más barato del mundo para el año 2030.
Basándose en este análisis, durante noviembre del año 2020, el Ministerio de Energía publicó la hoja de ruta que tomaría el país, la Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde, que establece las bases para desarrollar una industria de H2 sustentable en el país de aquí al año 2050.
El Equipo de Factchecking.cl estuvo presente en el Foro Chile – Noruega sobre hidrógeno verde, donde el jefe de la División de Combustibles y Nuevos Energéticos del Ministerio de Energía, Max Correa presentó dicho plan.
“Nos hemos fijado metas grandes y ambiciosas: queremos tener 5 Gigawatts de capacidad en electrolizadores para el año 2025 y producir hidrógeno competitivo a 1,5 – 1 dólar por kilogramo para el año 2030. Si somos capaces de hacerlo, estamos seguros de convertirnos en uno de los principales exportadores de hidrógeno del planeta”, describió Correa.
Allí también explicó que hasta el momento Chile ha firmado acuerdos bilaterales con naciones como: Singapur, Alemania, Países Bajos y trabajan para tener uno con Corea. En tanto, localmente, empresas generadoras de energía como AME, Engie y AES preparan tres grandes proyectos.
En la región de Magallanes, AME con su filial HIF planean producir combustible sintético desde 2022 y eventualmente realizar exportaciones a Alemania en 2026, mientras que Engie y AES, desde la región de Antofagasta desarrollarán amoniaco verde con una fecha de operación comercial estimada para el 2025.
La estrategia chilena
El plan de acción nacional del ministerio de Energía propone trabajar en las siguientes tres oleadas:
- La primera desde 2023 al 2028, producirá hidrógeno verde y sus derivados de manera local (amoniaco y combustible), de esta forma se reemplazarán estos productos que se utilizan en la industria nacional por unos más sustentables.
- La segunda oleada, desde 2028 al 2030 incursionará en la exportación de hidrógeno cuando el valor de este se vuelva más competitivo y los mercados internacionales tengan interés en adquirir productos libres de huella de carbono.
- Finalmente, desde 2030 en adelante el mercado de exportación crecerá, el transporte marítimo y aéreo podrán ser descarbonizados con combustible sintético, más países buscarán reducir sus emisiones y el precio del hidrógeno chileno será el más conveniente.
En el estudio Oportunidades de Crecimiento Verde para la meta de Descarbonización en Chile publicado en 2020 por el Banco Mundial, se plantea que, de instalarse una industria del H2V en el país, esta contribuiría un 21% en la disminución de emisiones contaminantes.
La investigación del Banco Mundial proyecta que, si Chile avanza en las políticas de mitigación de emisiones, (como la eliminación de combustibles fósiles, la promoción de la electromovilidad y el desarrollo del hidrógeno verde) el PIB del país podría crecer hasta un 4.4% para fines del 2050.
El informe de McKinsey & Company va más allá y formula lo que el presidente Piñera mencionó: de hacer las cosas bien, la industria del hidrógeno verde podría equiparar a la minería en el futuro.
Luego de contrastar los datos, el equipo de Factchecking.cl determinó que la afirmación del Presidente es creíble, ya que se pudo confirmar que nuestro país posee el potencial y se encuentra avanzando en una estrategia del hidrógeno verde para todo el territorio nacional, la cual sentaría las bases para utilizarlo localmente y, en un futuro, exportarlo. Además, es posible que el país lidere la industria del H2V en el futuro, lo que generaría nuevos empleos y un crecimiento económico tan significativo como la minería en Chile.