Por Josefina Fernández V.
Según cifras del Fondo Monetario Internacional, el crecimiento mundial de 2018 fue de un 3,7%, mismo porcentaje entregado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), por lo tanto Chile efectivamente estaría por sobre esta cifra. El presidente Piñera en diciembre de 2018 afirmó que Chile mostró un crecimiento del 4,0% durante el año anterior, lo cual se condice con el informe de Cuentas Nacionales del Banco Central.
Las tasas de crecimiento en el mundo efectivamente van a la baja. Las proyecciones del Fondo Monetario Internacional publicadas en su documento: World Economic Outlook, no son positivas.
En abril de este año el FMI aseguró: “La actividad económica mundial se desaceleró especialmente en el segundo semestre del año pasado, como consecuencia de una confluencia de factores que afectaron a las principales economías”. En este mismo documento, se registra que el mundo sufre una desaceleración económica pasando del 3,6% a un 3,3% en 2019.
A raíz de estas cifras el ministro de Economía José Ramón Valente afirmó en Twitter que Chile mantiene el ritmo de crecimiento y que se necesita la “Modernización Tributaria” propuesta por el Gobierno para “acelerar la marcha, dar más empleo y calidad de vida”.
Sin embargo, en cuanto a las proyecciones de crecimiento, el doctor en Economía del MIT, Andrés Solimano plantea: “No me parece que una modernización tributaria va a acelerar el crecimiento, no me parece que reaccionará la inversión”.
En el documento WEO se identifica una proyección a la baja del PIB nacional: 4,0% el año pasado, una proyección de 3,4% para este y para 2020 una proyección de 3,2% del PIB. Sin embargo, desde el Ministerio de Economía afirmaron que sí se mantiene, si se compara con el mismo informe de del año anterior.
Para Fernando Coloma, experto en Comercio Internacional y académico de la Universidad Católica, asegura que el hincapié desde el Gobierno por la necesidad de una modernización tributaria va a ayudar, pero no va a exagerar el efecto que tendría en términos de crecimiento, ya que hay otras cosas que son importantes como la inversión en capital humano, claridad en reglas del juego, temas específicos sectoriales, tema laborales que ayudan y contribuyen al crecimiento.
“La reforma o modernización tributaria puede ayudar, pero creo que no tanto, no es demasiado incisiva en promover la inversión. Sí hay algunos aspectos, pero no es suficiente”, explica Coloma.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en marzo de este año, manifestó su apoyo a la modernización tributaria. El Director del Centro de Política Tributaria del organismo anteriormente mencionado, Pascal Saint Amans en su visita a nuestro país, manifestó: “Apoyamos decididamente el proyecto tributario que se ha presentado (…) la mayoría de las medidas de este proyecto tributario tendrán un impacto positivo en el crecimiento y el empleo”.
Por otra parte, el académico de la Universidad Católica, Rolf Lüders, plantea que en el corto plazo, la modernización tributaria, tal como la propone el gobierno, si tendría como efecto un aumento en los flujos de capitales, que deberían aumentar el crecimiento. Sin embargo, a mediano y largo plazo no es una gran diferencia.