Por Camila González
Durante una conferencia en el Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE), María José Castro aseguró que por decreto de ley los niños no pueden dejar de jugar cuando pasan de kínder a primero básico.
Para confirmar la información, ingresamos a la página web de la Subsecretaría de Educación Parvularia, pero no tenían una línea directa. Fue por medio de ayuda del Mineduc que conseguimos un anexo, el cual rebotó un par de veces. Por lo mismo, decidimos twittear a la propia subsecretaria, a la Seremi de Educación Metropolitano, a la Subsecretaría de Educación Parvularia y a otras entidades relacionadas.
Para corroborar si existe tal decreto, usamos el buscador de la página web de la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile y no arrojó ningún resultado, así que realizamos una solicitud de información para ver si encontraban algo, respuesta que llegó a los dos días. Por un lado, un enlace al decreto N°373 exento y, por otro, una nota sobre la importancia de la transición de kínder a primero básico.
Buscamos los detalles del decreto N°373 exento, titulado: Establece principios y definiciones técnicas para la elaboración de una estrategia de transición educativa para los niveles de educación parvularia y primer año de educación básica. Al revisar los detalles del decreto, lo más cercano a lo que afirma la subsecretaria, se encontró en la parte del anexo (ver fotos adjuntas).
En el anexo con las definiciones técnicas, en el apartado de la gestión pedagógica dice: “la estrategia debe proponer explícitamente iniciativas para la articulación entre ambos niveles educativos, que propicien experiencias para el aprendizaje y juego que enriquezcan sus posibilidades de comprensión de sí mismos y del mundo, en diversos espacios del establecimiento, y también si es posible, fuera de este”, se lee en el decreto. En este extracto solo se hace alusión al diseño e implementación ideal de la estrategia.
De acuerdo a la declaración de la autoridad y la información entregada desde la Subsecretaría de Educación Parvularia, ambas afirmaciones no coinciden. Y por otro lado, el decreto N°373 que encontramos a pesar de que trata una idea similar a la que se plantea, no coincide con en el grado de legalidad que plantea la subsecretaria María José Castro, es decir, lo que dijo era una pretensión.