Por Katherine Páez y Aurora Coddou
Luego de los dos ataques incendiarios que afectaron a las comunas de Vilcún y Lautaro en La Araucanía el pasado 16 y 17 de abril y en medio de una visita de ministros a la zona, el intendente de la región, Luis Mayol, declaró a la prensa que el personal de Carabineros no era suficiente para cubrir todos los puntos fijos de vigilancia permanente.
En primera instancia, el equipo de Fact Checking UC intentó comunicarse con el intendente en reiteradas ocasiones para verificar las fuentes en las que se basa para asegurar el déficit, pero aún no recibe respuesta.
Para verificar que existe un déficit, el equipo pidió respuesta vía ley de transparencia a Carabineros sobre la cantidad de efectivos asignados a la zona; dicha solicitud aún está en proceso, por lo que se recurrieron a estadísticas entregadas públicamente por Carabineros. Específicamente, recopilamos las estadísticas entregadas por la institución a la prensa durante enero por la visita del Papa, dotación nacional de Carabineros es de alrededor de 57.000 efectivos, y de ellos, cerca de 3000 están en La Araucanía según el jefe de la IX Zona de Carabineros en ese momento, general Christian Franzani.
En la Cuenta Pública 2017 de la Fiscalía en la IX Región se incluye información sobre puntos fijos: “Actualmente existen vigentes 356 medidas de protección en el ámbito de violencia rural en nuestra región, de las cuales un 32% corresponde a medidas de alta intensidad (puntos fijos policiales permanentes o parciales)”. Con estos antecedentes se puede llegar a la conclusión de que hoy existirían alrededor de 114 puntos fijos verificados.
En cuanto a la asignación de carabineros para cubrir esta tarea, los uniformados necesarios están determinados por el análisis de la oferta y demanda por servicios policiales de una comuna, medida en Unidades de Vigilancia Equivalente (UVEs). Esta unidad de medida sirve para cuantificar las demandas por servicios policiales y, al mismo tiempo, expresar la capacidad operativa de los distintos recursos que la institución dispone para satisfacer dichas demandas. Lo anterior permite conocer el déficit o superávit de recursos de cada cuartel y son estadísticas que calcula la institución, tal como se explica en el informe del Programa Plan Cuadrante de Seguridad Preventiva del Ministerio del Interior y Seguridad Pública en 2014 (pp 107), donde se muestra que la oferta del servicio de punto fijo es la que tiene menor prioridad e índice de capacidad para ser cubierta.
Un informe de Carabineros en 2014 dio cuenta del incremento de 35,6% en dotación de carabineros en la Región de La Araucanía producto del alza en medidas de protección. Entre Malleco, Cautín, Arauco y Valdivia, Carabineros debía cumplir con 229 medidas de protección permanentes en predios, además de realizar 352 rondas de protección temporales en otros recintos privados. La Fiscalía Pública de la IX Región en su Cuenta Pública del año 2016 dijo: “las medidas de protección dispuestas por la Fiscalía Local aumentaron en 2015 y las con mayor intensidad (puntos fijos permanentes y nocturnos, además rondas policiales) se incrementaron en un 85% respecto al año anterior”.
Carabineros informó de un déficit de personal en la zona al Ministerio Público a través de un Oficio el pasado 19 de octubre de 2017. Según La Tercera, que tuvo acceso al documento, el texto explica que “Carabineros, a través del jefe de zona de la IX Región, le comunicó a la fiscalía la ‘imposibilidad’ de cumplir la medida de protección fija para un testigo (…)”. En el oficio se dijo que “la Dirección Nacional de Orden y Seguridad, ha autorizado una cantidad máxima de recursos humanos para el cumplimiento de medidas de protección en la región, el cual ya está excedido en un 35 %”.
También explicaron que en los últimos años han requerido que se subsidie la demanda con personal que cumple tareas de prevención de la violencia rural y de control de orden público, lo que ha generado a la fecha un déficit importante en los recursos que cumplen estas funciones. Carabineros dijo que no pueden seguir derivando más uniformados a estas tareas, «dejando de cumplir otras, que la institución le corresponde cumplir por mandato constitucional”, además de rechazar entregar la protección fija.
Se pudo verificar que el personal de carabineros de puntos fijos (permanentes y temporales) tiene una tendencia al alza en los últimos años y también el número de personal de Carabineros aumentó, pero la institución ha manifestado que no son recursos suficientes en proporción para cubrir tanto labores prioritarias como las de protección.